Leía esas notas de chisme que hay en el blog
que has diagramado, y me hizo reír esa anécdota del ropero y que el
Teniente Pacho desbarató a golpes....es verdad, la recuerdo y me doblo
de risa. (MIRALO AQUI)
Solo hay un error
"histórico", yo estaba de cuartelero, y el que se escondió dentro de ese
ropero individual, y que recibió todos los golpes que le aguardaban en
la vida, fue nuestro recordado Carpayo (Héctor Carpio Estremadoyro).
Yo
lo que tenía era un ropero empotrado al que le había quitado las
gavetas y guardaba en otro lado mis cosas, ese ropero empotrado tenía un
candado con su aldaba que se sujetaba desde adentro.
Así que el que quería tirarse la pera del buzo, se metía, y desde adentro
agarraba la cuerda que sostenía la aldaba, de tal manera que desde adentro se veía el ropero como cerrado normalmente.
Todos los compañeros del dormitorio 32 del 1ero. año de Cadetes, lo bautizaron como "El Tren".
C.C