ESTO ES HISTORIA .

Querido primo Ricardo:

Muy sentidas y conceptuosas tus frases vertidas en esta semblanza acerca de mi padre. No podrian ser de otra manera, de quien conserva vívido el profuso y exquisito historial de nuestra bendita Guardia Civil. Tu relato acerca de los hechos, se ciñe en muchos aspectos al real desarrollo de los acontecimientos de aquella triste jornada de Junio de 1969; no obstante, considero menester puntualizar algunos detalles históricos que definan un mejor contexto respecto
de tan importante episodio nacional.

Desde el día 13 de Junio de 1969, Ayacucho vino soportando una serie de movilizaciones populares, promovidas por el entonces Frente de Defensa del Pueblo, organismo de fachada del Partido Comunista del Perú. El FDP, encabezado por el Profesor Rudecindo Contreras organizó marchas de protesta, mítines y finalmente un paro general en la ciudad de Huamanga, con repercusión en otras provincias como Huanta. El desborde era general. Las turbas habian paralizado todo género de actividades en la ciudad y se habian enfrentado abiertamente contra la Policía. Con el principio de autoridad mermado, la ciudad diezmada por el descontrol y el populacho enardecido; el panorama de orden social era francamente crítico, pues estaba bloqueda la carretera, paralizado el comercio por los saqueos, sitiada la 9na Comandancia GC y demas
Mi padre, a la sazón Jefe de la V Región GC en Iquitos, hubo de trasladarse haciendo uso de un permiso, a la ciudad de Ayacucho. La razón obedecía a tener que acompañar a mi madre, a los funerales de mi abuela fallecida un 15 de Junio de 1969 en Huamanga. Luego de los servicios fúnebres y debiendo quedarse unos dias a fín de resolver diligencias propias del deceso, pudo comprobar directamente la gravedad de los sucesos así como la medrosa actuación del personal GC en el restablecimiento del orden. Se dirigió a entrevistarse con el Jefe de la Novena Comandancia, por entonces el Tnte. Crnl. GC Ciro Nuñez Arce, a quien lo instó a proceder a la altura de las circunstancias y con arreglo a ley y los reglamentos, disposición que, al parecer no se cumplió a cabalidad.

El día 20 de Junio, mi padre escabullido y vistiendo poncho y chullo para sortear los piquetes de revoltosos que apresaban a propios y extraños, se dirigió nuevamente a la Comandancia, esta vez para dirigir un radiograma al Director General Tnte.Gral.GC Jorge Barrios Palomino, comunicando que debido a lo álgido de la situación y en cumplimiento de lo dispuesto en el Reglamento General de Servicio en Guarnición así como por tratarse del Oficial de mas alta graduación en dicha plaza, se hacía cargo del comando de las fuerzas del orden y que en el día se estaban adoptando las disposiciones pertinentes para conjurar la grave perturbación.

El mismo día 20 reorganiza las fuerzas impartiendo las órdenes precisas para actuar a partir de ese momento de forma resuelta y enérgica. Solicita refuerzos a Lima y planea la inmediata ubicación y captura de los principales azuzadores de la revuelta asi como la implantación del Toque de Queda. Esa mañana se producen sendos enfrentamientos con los grupos revoltosos, uno de los cuales llevaba en hombros los restos de un supuesto caido, que al escuchar los disparos de los efectivos, "muerto" incluido, se dieron a la fuga.
La madrugada de ese 21 se incursionó con el apoyo de la Guardia de Asalto, en el local de la UNSCH y en varias viviendas particulares logrando la captura de 21 entre docentes y agitadores, entre ellos al profesor de filosofía Abimael Guzmán Reynoso, de tan infelíz y postrera recordación.

Entre tanto, la ciudad de Huanta soportaba similar situación de desorden en manos de miles de sediciosos, que habian tomado de rehen al Sub Prefecto Octavio Cabrera Rocha y llevado a las alturas por un grupo de campesinos. Se cuenta que la autoridad política, con la finalidad de amainar el frio de las punas, encargó la compra de caña y coca, prodigándose una andanada de copas hasta generar una borrachera total y que finalmente le permitió darse a la fuga en la oscuridad de la noche. La Estación PIP de Huanta fue totalmente quemada a raiz de la fuga de los detectives que solo atinaron a llevarso consigo 15 pistolas ametralladora Madsen, con las que bien pudieron defenderse; tal acción sería luego denunciada a la Zona Judicial de Policía.

La situación respecto al Puesto GC, sería diferente. El Comandante de Puesto, herido en la cara por disparos de perdigones, se atrincheró en su local con su personal, armados solo con revólveres y 2 metralletas Star Z-45 conteniendo el asedio de dinamita y bombas Molotov por espacio de 72 horas, hasta la llegada de los refuerzos de la Guardia de Asalto quienes llegaron, no sin antes echar pie a tierra en medio camino pues habian sido volados con explosivos los puentes Ayahuarcuna y Tablachaca que conectan con dicha ciudad.

La Guardia de Asalto entró a Huanta a eso de las 6 de la tarde del 22 de Junio. Su llegada fue providencial puesto que al personal del Puesto GC, se le habian acabado las municiones de reserva y su inminente captura era solo cuestión de minutos. Asalto entró en refriega con los grupos insurrectos en diversos puntos de la ciudad. El triste desenlace de aquella infausta tarde fue de 20 muertos, a parte de los 15 que hubo en Huamanga, lográndose la captura del agitador Mario Cavalcanti Gamboa. Este pasaje de los hechos inspira el conocido Huayno "Flor de Retama" que interpreta Martina Portocarrero y en el que se aluden falsamente a los Sinchis como quienes entraron por 5 esquinas; la 48-CGC de Mazamari nunca tuvo participación en estas acciones y que probablemente la confusión se debió a que la 22-CGC usaba por ese entonces una casaca con camuflaje de cierta similitud al que usaban los Sinchis.
Ayacucho no volvió a transitar por aventuras revolucionarias en los 12 años siguientes, hasta la aparición de la guerra popular de Sendero Luminoso cuyas terribles consecuencias hasta hoy las percibimos.
Mi padre se reincorporó a su puesto de origen en los siguientes dias. No se le recompensó, tampoco fue sometido a alguna medida coercitiva por el costo social que acarreó el resultado. La condecoración de la Orden Militar de Ayacucho que obtuvo por Acción Distinguida, no fue por los sucesos descritos, fue por haber comandado la Operación "Pomacocha" en 1966 durante la Campaña Contraguerillas del Centro, en la que se desempeño como Jefe de la Región GC de Huancayo.
Dicha premiación tambien alcanzó al entonces Mayor Octavio Herrera Polo, los Capitanes Huber Mendiolaza Bazaldúa y Santiago Brañez Beltrán y al Alferez Fernando Vargas Vargas, mi amado y fallecido hermano.

Espero mi querido primo Ricardo, que los hechos relatados sean apreciados en su real dimensión tanto de tiempo como de espacio. Fueron cisrcunstancias muy adversas y en las que muy a nuestro pesar de peruanos y hombres de fe; hubo que tomar decisiones drásticas, exponiendo no solo la propia existencia sino tambien la carrera y la estabilidad personal familiar. El espíritu de sacrificio y la entereza de asumir responsabilidades trascendentales, eran la característica inequívoca en la actitud viril de nuestros antiguos jefes. A Dios gracias todavía muchos de nosostros nos nutrimos de esa sabias enseñanzas y esos grandiosos ejemplos.
Hasta la vista Primo:

Cucho Vargas Vargas.