DE VICTOR ROJAS GARCIA

Verguenza, indignacion, estupor y fundamentalmente profundo dolor son los sentimientos que me embargan despues de haber visto, por intermedio de los medios televisivos, los luctuosos acontecimientos del dia Jueves. Como hombre que ha entregado 37 años de su vida a la Institucion Policial, no puede ser de diferente forma. Si bien es cierto que la Policia Nacional hace tiempo ha tocado fondo, creo que nadie se ha imaginado ver las dantescas imagenes que con morbosa persistencia mostraban al mundo los medios de comunicacion. Efectivos Policiales vejados, bilipendiados, humillados por un populacho lumpenesco ebrio y sediento de dar rienda suelta a las mas abyectas taras que un ser humano, marginado y resentido con su existencia, puede tener. Efectivos Policiales expuestos en su integridad fisica y moral no se sabe por quien o quienes, porque lo que se puede ver en las imagenes es una acefalia total de uniformados montados y a pie que tratan de repeler el ataque de una turba amorfa y envolvente que los linchan sin compasion. Ante el mundo, el Peru a mostrado, mediante el ejercicio de la barbarie, ser un pais donde conviven la incivilizacion y la miseria material y moral con el crecimiento y desarrollo economico que las frias cifras de analisis economico muestran. Una vez mas la Policia Nacional es el parapeto politico del poder. Indudablemente existe y se puede apreciar con nitidez, la pusilanimidad complice de los altos mandos, quienes enquistados en sus puestos, no bacilan en aceptar imposiciones y acatar ordenes aun a costa de la vida de sus efectivos. Es reiterativo señalar que el cuerpo policial no esta equipado adecuadamente, que sus efectivos no estan debidamente formados y mucho menos entrenados para hacer frente con exito a la cada vez mas dificil labor policial. Pero, lo que se ha desnudado el dia jueves, es la ineptitud, torpeza e incapacidad en la ejecucion de los Operativos Policiales. Algunos funcionarios municipales han señalado que hubo una adecuada planificacion de su parte, pero por parte de la Policia ¿habran habido atisbos de planificacion?, ¿se habra formulado algun plan de operaciones?, ¿quien comando el operativo?, ¿donde se encontraba el Jefe de Region mientras sus efectivos policiales eran sacrificados cual cristianos en el coliseo romano?. Realmente debe ser vergonzoso aparecer como cabeza de una institucion cuyos efectivos, debido a mi ineptitud, protagonizaron tan bochornosos como lamentables hechos. Pero cuando uno esta en el poder gozando de sus granjerias, pierde la prespectiva de los hechos y con tal de mantenerse en el cargo simplemente se olvida de virtudes que debieron ser la base de su formacion como la dignidad, el honor, la verdad y fundamentalmente el apego y profundo amor a la Institucion. Estoy completamente seguro que el "susanazo" como se ha comenzado a llamar a los hechos materia del presente comentario pasara a formar parte de ese acerbo ignominioso que sepulta a la Policia Nacional en el mas vil de los oprobios, juntamente con los "moqueguazos", "baguazos" y demas "azos" y la Institucion Policial continuara hundiendose en el nauseabundo fango de su extincion a vista y paciencia de sus Generalitos premunidos de sus "bastoncillos" de mando. Realmente una pena.