FUTURAS CIVILIZACIONES
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POR JOSE BORRAS
EN EL PRESENTE TRABAJO ABORDAMOS EL ESTUDIO DE LAS CARACTERÍSTICAS QUE SEGÚN LOS CONOCIMIENTOS QUE NOS PROPORCIONA LA SABIDURÍA DE LA TRADICIÓN GALÁCTICA HABRÁ DE TENER LA FUTURA CIVILIZACIÓN. CIVILIZACIÓN, CUYOS GÉRMENES SE EMPIEZAN A IMPLANTAR EN EL MOMENTO PRESENTE.
TODAS LAS CIVILIZACIONES TIENEN UN NACIMIENTO, UNA ETAPA DE DESARROLLO, DE
CRECIMIENTO, HASTA LLEGAR A UN MÁXIMO DE EXPLENDOR, Y LUEGO UN DECLIVE, UN OCASO, HASTA LLEGAR A SU DESAPARICIÓN.
TODO, ABSOLUTAMENTE TODO CUANTO EXISTE ESTA SOMETIDO A LAS GRANDES LEYES DIVINAS. LA SABIDURÍA INICIÁTICA BUSCA EL CONOCIMIENTO DE ESAS LEYES PARA TRATAR DE ARMONIZAR LA CONDUCTA CON LAS MISMAS.
LAS RAZAS HUMANAS SE TURNAN EN SU HEGEMONÍA SOBRE EL PLANETA. CADA UNA ENGENDRA UN KARMA, CUYOS EFECTOS HABRÁN DE PAGAR EN LA SIGUIENTE RONDA, EN LA SIGUIENTE CIVILIZACIÓN.
Las escuelas más tradicionales y reconocidas hablan de siete periodos de manifestación de la conciencia del Dios de nuestro sistema solar con el nombre de PERIODOS PLANETARIOS. Según esta doctrina, cuyos conocimientos provienen de la investigación espiritual en los planos internos de la realidad, existen siete periodos conocidos como:
CADENA DE SATURNO
CADENA DEL SOL
CADENA DE LA LUNA
CADENA DE LA TIERRA
CADENA DE JÚPITER
CADENA DE VENUS
CADENA DE VULCANO
Estos nombres hacen referencia a que en estos momentos, en la presente cadena, los planetas a cuyos nombres se alude contienen unas condiciones equivalentes a aquellas por las cuales la Tierra atravesó en los periodos correspondientes. Existe una simetría entre los tres primeros periodos y las tres últimas. La nuestra actual, la cuarta, es la que marca el cambio en la trayectoria de la evolución. Pasamos de el periodo de involución en la materia a iniciar el periodo de evolución con liberación progresiva de la dependencia del sustrato material. Se inician así los trabajos para salir del cuarto reino, para acceder al quinto reino, cuyos cuerpos de expresión no poseen una naturaleza tan densa como la nuestra actual.
En cada periodo de manifestación se turnan
siete razas. Para el actual periodo terrestre son:
RAZA POLAR
RAZA HIPERBÓREA
RAZA LÉMUR
RAZA ATLANTE
RAZA ARIA
SEXTA RAZA -Por venir-
SEPTIMA RAZA - Por venir-
Cada una de las razas se ponen de manifiesto en diferentes periodos de densidad del planeta. El tránsito de la humanidad por estos siete niveles recibe el nombre de Ronda. Cada Cadena implica siete Rondas. Nosotros nos encontramos ahora en la cuarta Ronda del Periodo terrestre.
En estos momentos nos encontramos en pleno proceso de manifestación de la Quinta Raza o Aria, y en un punto de importancia clave.
Veamos brevemente algunas de las características de las razas que precedieron a la presente.
Usualmente no se hace referencia a las dos primeras más que en tratados enciclopédicos, muy especializados. Debido a su enorme distancia en el tiempo y en el espacio, su trascendencia perceptible para la consideración de la raza presente no es de relevancia.
La tercera raza posee una trascendencia perceptible, aún hoy en día. Por ello tendremos que detenernos un poco en su examen.
Sobre la humanidad Lémur se hizo incidir por parte de las Jerarquías Creadoras una energía específica que confirió en aquellos humanos semi-animales que pudieron resistirla la "Chispa de la Mente", como así se la designa de modo simbólico.
Así tuvo el hombre el más elemental de los tres aspectos a escala microcósmica, reflejo de los que es el Dios del sistema a escala microcósmica.
Otros dos momentos serán de importancia en el devenir humano: aquellos en que sean imbuidos dentro de la estructura del alma humana el principio segundo de SABIDURÍA AMOROSA y primero o de VOLUNTAD DIVINA.
En el periodo Lémur el hombre tuvo por vez primera la columna vertebral siguiendo una trayectoria vertical. A costa de una de sus anteriores polaridades sexuales de hermafrodita se generó el cerebro y la laringe, órganos indispensables para su recién adquirida facultad pensante.
Hasta mediados de la Raza Lémur los cuerpos humanos habían sido de naturaleza etérica. Los actuales científicos dan a ese estado el nombre de plasmático.
Esto explica la inexistencia de fósiles humanos correspondientes a este periodo de la humanidad
Pasando a la Cuarta Raza o Atlante tenemos un hecho más importante que ninguno. Es el de la condensación de la atmósfera terrestre. Antes no fue posible debido a la alta temperatura reinante y a la cantidad de agua en suspensión. A medida que el planeta se fue enfriando gradualmente el agua se condensaba, y así en un momento crucial pasó del estado gaseoso al líquido, ocasionando este ancestral "Diluvio Universal" que es recogido en todas las religiones de la tierra.
Ese fenómeno, además de ser el responsable de la desaparición de la poderosa civilización atlante, hizo posible que el hombre utilizara adecuadamente sus ojos físicos, y consiguientemente, localizase su conciencia ordinaria o de vigilia en el mismo plano físico en el que se desenvuelve la conciencia de nuestra humanidad actual. Anteriormente, dado que la espesa niebla le hubiera hecho imposible la percepción visual física, las facultades perceptivas en el hombre eran aquellas que actualmente se denominan paranormales.
Cada una de las razas se divide a su vez en siete sub-razas. Cada una de estas sub-razas tiene su propia entidad, y significación dentro del proceso de la evolución. La sub-raza cuyo número se corresponde con el de la Raza es aquella en la cual se activan las características específicas propias de la raza, y la sub-raza siguiente es la que se utiliza como germen para asentar sobre ella las condiciones genéticas -no solo físicas, sino emocionales e intelectivas- de la que será raza subsiguiente.
De esta forma, en la cuarta Sub-raza, que tiene el nombre de Tlavatí, se desarrollaron las características de la Raza Atlante y en la quinta Sub-raza o Semita, se establecieron las bases de nuestra raza actual, la Aria. La historia de ese proceso ha llegado hasta nosotros, muy desfigurada, por medio de las Sagradas Escrituras en el Antiguo Testamento.
Dentro de la Raza Aria hay siete sub-razas. Las sub-divisiones a nuestra quinta sub-raza son las siguientes:
SUB-RAZA ARIA HINDÚ
SUB-RAZA PERSA
SUB-RAZA CALDEO ASIRIO EGIPCIA
SUB-RAZA GRECO LATINA
SUB-RAZA ANGLOSAJONA EUROPEA
SUB-RAZA ACUARIANA FILADELFICA
SÉPTIMA SUB-RAZA
En el momento actual ya hemos avanzado en la transición entre la quinta sub-raza, que está tocando a su fin, o ha tocado y la sexta sub-raza incipiente, que lleva algunos años modelándose en determinadas zonas geográficas, como Australia, sur de Estados Unidos, etc. aunque personas aisladas surgen en mucho puntos del planeta.
En la inicial sub-raza Aria, emanada directamente de un núcleo muy selecto de la quinta sub-raza de la cuarta raza, la percepción del plano físico no era perfecta. Esa característica de plena identificación con el mundo externo sólido, era propia de la raza semítica, que se fue perdurando de tal forma que ha llegado vigorosa hasta nuestros días, como resultado de haber protegido cuidadosamente pureza racial, y evitando las conexiones con otros pueblos. Así pues los arios originales, asentados en el Sur de Asia, aunque provinentes de Europa, y con cultura atlante, elaboraron una cultura fuertemente espiritual que rehuía la experiencia física a la que concedía un valor ilusorio, y se esforzaba en recuperar a superior percepción espiritual que era patrimonio de sus antecesores los atlantes. El nivel más determinante en cuanto a experiencias fue el emocional y sus instructores espirituales ejercieron su influencia no por medio le un mensaje articulado conceptualmente , sino básicamente por medio del sonido y la vibración, a través de métodos que fueron adecuados para esa época, como son los diversos Yogas, pero que hoy día ya no tienen razón de ser.
La segunda Sub-raza, Persa, se sitúa más distante en el tiempo de lo que habitualmente establece la cronología histórica oficial. Esta humanidad poseyó una percepción más acabada del plano físico, y por ello reconocían la realidad del mundo exterior, distinto de los niveles espirituales que habían sido habi tualmente percibidos por la anterior humanidad.
Con objeto de que no perdiesen la conciencia de la existencia de los niveles internos de la realidad, del mundo de las causas, les fue dada una religión: La Mazdeista. Religión que expuso la existencia dual del Universo, su omnipresente polaridad, en torno a cuyos vértices se estructura el espíritu y la materia, la luz y la oscuridad. Se les mostró la existencia de todo un amplio abanico de entidades que presidían el curso de ambas corrientes dentro de la Creación a las cuales dieron, respectivamente, los nombres de Ahura-Mazda y Ahrimán.
La tercera sub-raza, Caldeo-Asiria-Egipcia desarrolla las facultades de razonamiento intelectual y la identificación de la conciencia de vigilia con la percepción física. En esta época se generalizan las llamadas Escuelas de Misterios de la Antigüedad. Fue en este momento cuando se hizo preciso un tipo de enseñanza que mantenía siempre presente una concepción adecuada de la realidad, que las percepciones humanas habían perdido temporalmente.
En las Escuelas de Misterios se impartían enseñanzas sobre los niveles o planos internos de la realidad y se utilizaban técnicas que avivavan las antiguas facultades atlantes, ahora dormidas en el hombre común. Así el hombre, por medio del trance en su vida física y por la experiencia directa en la muerte iniciática, podía ponerse en contacto con esas otras dimensiones de la existencia y con los seres espirituales que en ellas residen.
En la cuarta Sub-raza, la Greco-Latina, el hombre pierde los últimos vestigios de su anterior clarividencia. Sin embargo la cultura griega tiene siempre presente la tradición, que fue conservada por sus importantes Escuelas de los Misterios Mayores y Menores, y gracias a ella consigue una única y excepcional forma de percepción, sin paralelo en toda la historia.
Centrándose en el conocimiento y experimentación puramente físicos, capta, no obstante, en todo su esplendor, la realidad de la esencia espiritual que informa y estructura esa externa conformación física.
Esa forma incomparable de percepción de la naturaleza es la que dio lugar al más sublime de los artes que la humanidad ha conocido hasta la fecha. Ninguno como él ha podido cumplir la función básica de toda manifestación artística, que al igual que la religiosa consiste en vincular y exponer de forma perceptible, desde el ámbito material, la REALIDAD ESPIRITUAL que constituye su alma interna, su ESENCIA.
Es en la cultura latina cuando el hombre pierde virtualmente todo su anterior conocimiento de los planos internos, y es por ello que las figuras de sus dioses resultan huecas y desprovistas de todo contenido, tal como era en la compleja y simbólica mitología griega.
Al haberse producido la perfecta fusión de la conciencia humana con su herramienta física, el cerebro, el hombre se ve necesitado de otro tipo de instrucción religiosa. Una instrucción de tal índole que permita la conexión con la realidad espiritual interna, ejercida únicamente por medio de las facultades intelectuales y emocionales, tal como son expresadas por medio del cerebro físico, y carente en absoluto de todo tipo de percepción clarividente.
Una enseñanza de este tipo nunca había existido anteriormente sobre la tierra. Se preciso de la encarnación específica de una Entidad del más alto nivel, externa a la tierra, para poder aportarla. Esa entidad debería hacer uso de un cuerpo con un cerebro y unas condiciones anímicas que solo se daban en aquel entonces en la raza de los hebreos. La suprema entidad encarnada en un cuerpo de raza judía fue Cristo. Con este acontecimiento, en verdad eje de la historia, nos colocamos ya en nuestra quinta sub-raza Anglo-Sajona-Europea.
En tanto que Buda había mostrado a la raza Aria-Hindú la forma de unión con la divinidad por medio del principio intelectual, Cristo mostró hace más de 2.000 años el camino que habríamos de seguir para llegar a una plena fraternidad, para obtener esa fructificación del amor que todos esperamos..Pero era de tal envergadura su misión que no ha podido culminarse en toda una era zodiacal. Ha sido preciso que transcurriese todo el signo de Piscis para que ahora, en la entrada del signo de Acuario,(Aproximadamente desde el año 1954—Ciclo de 2160 años--) y tal como se registra en el libro de la revelación o Apocalipsis, se produzca esa segunda venida, cuyos signos nos rodean en la actualidad.
Esto último, estimo, debemos interpretarlo en su justa dimensión. Al abandonar el cuerpo de su encarnación, el Cristo Cósmico dijo a sus discípulos : "he aquí que permaneceré con vosotros hasta el final de los tiempos". En la muerte, el aura de Cristo se interpenetro con el aura del planeta. Se inicio el
proceso de ruptura de los velos etéricos que separan la conciencia del hombre actual con los planos internos. Esa ruptura se hará progresivamente más amplia. Esto es lo que se representa simbólicamente con la frase alusiva a la "ruptura del velo del templo", el terrible estremecimiento de los etéres planetarios al sufrir el impacto de la Energía Crística en el momento de la desencarnación. La presencia del Cristo es constatable por los clarividentes en el plano etérico. Su influencia se hace cada vez más y más notoria; habrá cada vez más personas que realicen su Cristo interno, que se cristifiquen. Habrá un retorno al verdadero cristianismo. Esto ya se ve en el surgimiento por doquier de grupos carismáticos formando auténticas comunidades de cristianos vivencíales.
La naturaleza, los cuerpos físicos de la sexta sub-raza notablemente depurada en su composición etérica, en parte debida a cambios muy importantes en la alimentación, pemitirá la facultad de la visión a nivel etérico. Ello tendrá varias consecuencias de importancia trascendente. En primer lugar derribará de forma irrecuperable todas las concepciones filosóficas y científicas de orden materialista. Ello permitirá la percepción directa de entidades que hasta la fecha han sido consideradas como simples especulaciones. Hará algo muy importante, cual es la comprensión en profundidad del fenómeno de la muerte física. El hombre podrá comprender de verdad que el abandono del cuerpo físico no implica interrupción de la existencia.
Comprenderá que la muerte es únicamente un cambio transitorio en el proceso de adquisición de experiencias del alma en el gran teatro del universo.
Se constatará la existencia de la Fuerza Primordial que es el sustrato de toda vida y que se distribuye por esa red de canales modeladores de la forma material y que constituye el cuerpo vital O morfogénetico.
El conocimiento de esa fuerza y de las formas de su aprovechamiento y utilización liberará al hombre de su dependencia de energías minerales y fósiles, tal como sucede en la actualidad y la sustituirá por esa energía viviente.
El dominio de esa energía le abrirá Las puertas de los planos internos y de otras dimensiones dentro del Cosmos.
La forma de expresión social no será muy diferente de la presente. Existirán entidades nacionales, si bien comprendidas de una forma muy diferente a la actual, con un carácter menos Idealizado, y se reconocerán como lo que son, formas peculiares de la expresión de la idiosincrasia de un conjunto de personas agrupadas en una determinada zona geográfica de nuestro planeta que dispone de unas carácteristicas que esas almas en encarnación requerían de forma concreta.
Se entenderá que ninguna nación es superior a las demás y que todas ellas son igualmente importantes y necesarias en el conjunto mundial.
Toda la estructura social será federativa. La forma de gobierno será, en términos generales, la de una república presidida en diversos escalones por consejos elegidos comunitariamente entre los más capaces. No los supuestamente más capaces, sino los auténticamente más capaces. La capacidad de percibir el aura del individuo y el conocimiento de su pasado evolutivo por lectura en los archivos akásicos, así lo permitirá. Se elegirán las personas más próximas al Creador por su bondad, amor universal, sabiduría.
La función gubernamental será descentralizada. A esto contribuirá la forma de establecerse la población, más en consonancia con las necesidades de expansión natural, que harán que esa humanidad se armonice con la naturaleza al convivir de modo consciente con las entidades que dirigen su desenvolvimiento.
Las viviendas serán la expresión de esa nueva responsabilidad, y combinarán un razonable confort con ese amor por la naturaleza, incorporando elementos minerales, y sobre todo vegetales en gran profusión. Se dará un total predominio a la expansión horizontal sobre la vertical. A las formas redondeadas y esféricas sobre las cúbicas y provistas de aristas que hoy predominan.
Las actividades sociales serán comunitarias, procediendo de menor a mayor, comenzando a las equivalentes a las de casa y barrio actuales y siguiendo por las de zona o región, ya que las ciudades, tal y como hoy se conocen, tenderán a desaparecer.
La cultura sufrirá un cambio fundamental. La actual fragmentación irá cediendo el paso gradualmente al UNIVERSALISMO Y ENCICLOPEDISMO.
Se recuperará la antigua figura del sabio experto en todos los campos del conocimiento, pero en visión de síntesis y análisis -MATESIS-.
La sabiduría es patrimonio del espíritu, y con mejores vehículos el alma disfrutará de todos los conocimientos posibles.
La presente separación artificial de Ciencia, Religión, Arte, Filosofía, irá caminando hacia un fin seguro e irrevocable.
Poco a poco, en los distintos lugares del Globo y coincidiendo con los Centros de Expresión del planeta irán surgiendo las diferentes ESCUELAS INICIATICAS que retomarán el lugar de las antiguas Escuelas de Misterios, pero ahora en una expresión mucho más depurada y elevada. Estás escuelas se destinarán a los siguientes tipos de formación específica:
ESCUELA DE PRIMER RAYO: Formará a los dirigentes en los diversos niveles de la expresión humana.
ESCUELA DE SEGUNDO RAYO: Formará a los instructores y educadores.
ESCUELA DE TERCER RAYO: Formará a los filósofos.
ESCUELA DE CUARTO RAYO: Formará a los artistas y a los sanadores.
ESCUELA DE QUINTO RAYO: Formará a los científicos.
ESCUELA DE SEXTO RAYO: Formará a los sacerdotes.
ESCUELA DE SÉPTIMO RAYO: Formará a los magos.
La religión de la Nueva Era será una religión única, asentada sobre el conocimiento de las Leyes Divinas y Naturales. Participará de carácteristicas que hoy son propias de la psicología y de otras ramas de la Ciencia. Sus ceremonias irán destinadas a vincular a los hombres con la influencia benéfica de las entidades cósmicas. Ceremonias diversas, en las cuales la música y el color tendrá una importancia trascendental, facilitarán la progresiva conexión entre la evolución humana y la Angélica.
Auténticos Magos tomarán el papel que hoy cubren los ingenieros, expertos únicamente en la manipulación del reino mineral y algunos tipos de energía. Los magos podrán controlar las energías sutiles del reino vegetal y las energías. etéricas que se sitúan detrás de todo cuanto existe.
Los SANADORES irán sustituyendo a los médicos y por medio de observar por su clarividencia los diferentes cuerpos del enfermo, podrán proporcionar un diagnóstico exacto y luego aplicar sus facultades de emisión y manejo de bioplasma para restablecer el funcionamiento de los centros energéticos incorrectos. Así mismo se utilizarán conjuntamente las aplicaciones de luz de diversos colores y la vibración musical en el tratamiento y prevención de las enfermedades.
El hombre, antes que nada, se formara para realizarse como persona individual. Luego invertirá esa capacidad y esa formación personal en el servicio a sus semejantes y a los demás reinos de la naturaleza inferiores, a los cuales, como es su responsabilidad debe "redimir” y elevar a las alturas del espíritu.
El cuerpo del hombre será cada vez más sutil, hasta que llegue un momento, en una superior espiral evolutiva, en que se transforme el cuerpo físico en etérico, tal como ocurrió con Jesús el Cristo después de su resurección y en la transfiguración en el monte Tabor.
Al mismo tiempo que se irán notando más y más las influencias Crísticas, lo harán las Luciféricas y arhimánicas. Se harán inevitables fuertes y poderosas crisis selectivas, las cuales tienen lugar como en el hombre con las enfermedades, en el seno del experimento terrestre.
Según la sabiduría de la Tradición Galáctica este es, a grandes rasgos, el futuro que nos aguarda. El esplendor de estas futuras realizaciones quizás, en alguna medida, contribuirá hacer más soportables estos difíciles momentos de crisis que, previsiblemente, van a irse agravando en los años venideros hasta llegar a su culminación dramática, depuradora, pero también RENOVADORA, INNOVADORA E INICIADORA de una nueva era de más paz y armonía fraterna entre los hombres (las personas).
ATLANTIS
VIBRACIÓN. RADIACIÓN, EMANACIÓN
ESTAS TRES PALABRAS SE CORRESPONDEN CON:
EL INTELECTO, EL CORAZÓN Y LA VOLUNTAD,
LA VOLUNTAD VIBRA
EL INTELECTO IRRADIA
EL CORAZÓN EMANA
EN LA VIBRACIÓN HAY ENERGÍA
EN LA RADIACIÓN SABIDURÍA
EN LA EMANACIÓN AMOR
SEGÚN LA NATURALEZA DE LAS EMANACIONES
SE PUEDE SABER CUAL ES EL AMOR DE UN SER
SEGÚN LA INTENSIDAD DE SUS RADIACIONES
SE DESCUBRE CUAL ES SU SABER
SEGÚN LA POTENCIA DE SUS VIBRACIONES
Y CUAL ES SU FUERZA
ATLANTIS
Esto es un reducido o pequeño resumen. Espero os sirva. Un fuerte abrazo de la familia Borrás. Te mandare por correo fotocopias de varios ejemplares de cuadernos de metafísica. Os quiere
José Borrá Tortosa
Consejero Hijienista Dietetico
Naturopata Superior
Antroponomo
Vitacultor
LA DIETÉTICA AL DÍA
TOMATE
LYCOPERSICUM ESCULARTUM (SOLANACEA)
Esta fruta de indudable origen americano fue introducida en la alimentación por los españoles y portugueses al usarlo como una verdura y extenderlo en todo el mar Mediterráneo al principio y después a extender su cultivo a todo el mundo. La palabra tomate viene de una antigua palabra mejicana "tomatl"; y el término más romántico de "manzana de amor" Libes apfel (en alemán) y Love apple (en inglés) con que se le designó en principio ha caído en desuso.
La composición centesimal es la siguiente:
C/D og AGUA = 93
E <: PROTEÍNAS = 1
u 3 - LIPIDOS = 0,4
z tu GLUCIDOS = 4,2
0N ^* CELULOSA = 0,65
g-
Azufre (S) Fósforo (Ph) Cloro (Cl) Sodio (Na) Potasio (K) Magnesio (Mg) Calcio (Ca)
= 11
= 27
= 40 = 3,2
= 282
= 10
= 10,5
mg.
Hierro (Fe) = 0,65 Zinc(Zn) = 0,24
Cobre (Cu) - 0,15 Manganeso (Mg)= 0,13 Iodo (I) = 0,0072
mg.
Ac. pantoténico = 0,35 mg. Piridoxina (Vit. B6)= 0,25 " Carotinoides activas= 0,52 "
Ac. Ascórbico (Vit. C) = 40 mg.
Tiamma(B,) = 0,09 "
RivoflavinaíB,) = 0,045"
Amido ac. nicotínico (PP) = 0,48 "
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