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3 dic 2013

YA DIGAN LA VERDAD.!!!

Cortesia Correo  Articulo original aqui

Iván Slocovich Pardo


Cada día que pasa y se hacen notorias las burdas y desesperadas maniobras del oficialismo para que no se investigue por qué el Gobierno dio vigilancia policial a las casas del exoperador montesinista Óscar López Meneses, se acrecientan las sospechas de que algo muy grande y sucio se oculta, lo cual hace
temblar al régimen donde la honestidad hacía la diferencia.
Si el bloqueo a las investigaciones que busca la oposición y las filtraciones de datos a la prensa "amiga" son maniobras de congresistas ayayeros y operadores de medio pelo, pues que salga el propio presidente Ollanta Humala a dar un golpe sobre la mesa y a anunciar que se abrirá lo que haya que abrirse para que los rivales políticos analicen lo que quieran y vean que nada une al humalismo con el montesinismo.
El jefe de Estado debería tener en cuenta que está afectando no solo su imagen, sino la propia conducción del país, pues un régimen con olor a podrido en sus entrañas a nada bueno nos puede llevar. ¿A qué le teme Palacio de Gobierno como para no enmendarle la plana a quienes tratan de bloquear las cosas? ¿No se dan cuenta de que se están hundiendo más en el fango?
Hay que considerar que la actual legislatura terminará en breve y, conforme pasan los días, se hace evidente que lo que se está buscando en el oficialismo congresal es patear la cosa hacia adelante y que el tema se vaya enfriando, sabiendo quizá que en el Perú los escándalos son coyunturales y que algo tendrá que pasar para que en enero o febrero nadie se acuerde de los patrulleros de López Meneses.
Por qué no creer también que el tema se alarga en espera de que caiga del cielo el fallo de La Haya, que, a favor o en contra nuestra, permitirá distraer la atención de todos los peruanos y de quienes en el exterior están pendientes de lo que sucede en el Perú. Es por eso que la oposición y la prensa que no es "amiga" de Palacio de Gobierno, deben de estar muy alertas.
Si no hay nada que ocultar, el propio Presidente debería ser el primero en salir a hacer transparentes las cosas. El jefe de Estado y su esposa dieron una pésima señal al pedir que se investiguen las andanzas de López Meneses desde 1990. Hoy el Mandatario tiene la oportunidad de hablar y dar carta blanca a las investigaciones que servirían para lavarle la cara. Claro, solo si es que no hay nada sucio detrás.

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