En el Peru todos somos Luis Figari.

Esta es la iglesia de todos los tiempos, les pagamos con nuestros impuestos para que cada iglesia, confesionario o claustro religioso (todos) se conviertan en lo que en el Peru se conoce "pension soto : casa, comida y toto".
Y entusiastamente colaboramos con esto por que nos negamos a criticar bajo supuestos de fe religiosos o la infabilidad de la iglesia.
Sigamos asi y nos daremos cuenta que no hicimos nada cuando nuestros hijos o mujeres sean abusadas por las iglesias (todas)
El Chonta.
Pdta.
Motivo suficiente para quitarles el sueldo que les pagamos a estas proxenetas de la fe y dedicar ese dinero para los realmente pobres y necesitados (o violados).
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