Durante el debate presidencial hubo una pregunta de la ciudadanía dirigida a la candidata del Frente Amplio, Verónica Mendoza, que le interrogaba ¿qué va a hacer usted con la minería en Madre de Dios? a lo que la
postulante titubeó en contestar con evasivas. Y lo hizo por la causa oculta que su padre, Marcelino Mendoza Sánchez, tenía un concesión minera en una zona arqueológica en el Cusco, producto de una invasión a ese terreno.
La concesión minera llamada Verónica I, se ubica en la zona arqueológica Piquillacta en la zona sur del Cusco, y a la fecha tiene una disputa con el Ministerio de Cultura y el Gobierno Regional del Cusco por daños a la zona arqueológica de propiedad del Estado.
Marcelino Mendoza Sánchez, padre de la candidata presidencial, invadió una zona arqueológica y tuvo una concesión minera desde el año 1995 hasta el 2022 a la que llamó “Verónika I”. La concesión minera no metálica estaba ubicada en el distrito de Andahuaylillas, en Cusco, era de 200 hectáreas, y se encontraba dentro de la demarcación del Parque Arqueológico de Piquillacta.
Marcelino Mendoza explotó esta concesión por más de cinco años causando daños a la zona arqueológica, hasta que el Ministerio de Energía y Minas le canceló la autorización en el año 2000. La razón fue su proximidad al parque arqueológico Piquillacta y la falta de un plan de inversión. El padre de Verónika Mendoza no se quedó conforme con la decisión del ministerio y llevó el caso hasta el Tribunal Constitucional, donde perdió definitivamente la concesión.(01/04/16)
Marcelino Mendoza solicitó una acción amparo al Tribunal Constitucional (TC) después que el Instituto Nacional de Cultura (INC) le revocó la autorización de explotación minera, pero el TC lo declaró improcedente (Exp. N° 541-2001-AA/TC del 30/04/02)
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