Erase una vez un abogado probo, con sentido de ética, justicia y objetividad (al menos cuando recién se graduó), que estaba decidido a respetar y hacer respetar la Constitución Política del Perú y la normatividad vigente... Pero en el camino de su desempeño dejó que las tentaciones de una pronto riqueza y un ilusorio poder lo sedujeran, decidió vender su conciencia por 30 monedas como Judas a Jesús. Este magistrado es un claro ejemplo de lo que no debe ser un abogado, un hombre de leyes, un juez y más aún un miembro del máximo organismo encargado de velar y tutelar la plena vigencia de la Constitución Política del Perú: el Tribunal Constitucional. Estudiantes de derecho, cuando estudien y vean el comportamiento de este magistrado comprenderán, que en la historia de la defensa de la institucionalidad democrática y de la Constitución, hay sólo dos historias, los Judas, los Barrabás, los fariseos de la ley, y del otro lado, los que estamos dispuestos a permanecer firmes e incólumes en defensa del Estado de Derecho, los que ya fuimos amenazados por RMP, los que fuimos vinculados a la Coordinadora Republicana y otros que inmerecidamente no estuvieron mencionados en tan honorable lista de patriotas probos, íntegros y totalmente comprometidos con el pleno respeto y vigencia de los principios consagrados en nuestra Constitución Política del Perú como el principio de separación de poderes, el de la defensa de la soberanía nacional del Perú y el derecho que tenemos como patriotas de luchar contra la dictadura caviar que vivimos y de levantarnos de ser el caso, en insurgencia. El Colectivo de Madres para el Perú está dispuesto a salir a las calles para no permitir que este Gobierno apátrida le robe el futuro y los sueños de tener un país desarrollado, a nuestros hijos, nietos y generaciones venideras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario