ARTICULO ORIGINAL
CECILIA ROSALES FERREYROS
Lo llamaron el domingo antepasado por la mañana y aceptó. Se fue al aeropuerto para viajar ese mismo día de Washington –donde se desempeñaba como embajador permanente del Perú ante la OEA– a Lima, pero no tuvo suerte. Partió al día siguiente. Walter Albán confiesa que todo fue tan rápido que solo vino con una muda de ropa. Está buscando tiempo para dar un salto a la capital de
Lo llamaron el domingo antepasado por la mañana y aceptó. Se fue al aeropuerto para viajar ese mismo día de Washington –donde se desempeñaba como embajador permanente del Perú ante la OEA– a Lima, pero no tuvo suerte. Partió al día siguiente. Walter Albán confiesa que todo fue tan rápido que solo vino con una muda de ropa. Está buscando tiempo para dar un salto a la capital de