CACHACOS !!!( EL COMERCIO.)

Lourdes Flores y su percepción sobre los militares (*)

Con respecto a la posible compra de Repsol, la “Eterna Perdedora” Lourdes Flores en una entrevista recientemente realizada en Canal N, se ha referido al Presidente Humala diciendo “Creo que (Humala) entiende el lenguaje de los militares porque le gusta ser ´cachaco´ y se ríe haciéndose el gracioso, no
dice nada y es el ´cachaco´ que va metiéndose adentro, es indispensable que comprenda que su ´estilacho de cachacote´, va a encontrar una oposición muy fuerte” (Ver entrevista líneas abajo)
La palabra “cachaco” es un colombianismo cuya aplicación se hace a los militares y policías de ese país, habiéndose extendido a varios países sudamericanos entre ellos el Perú, cuyo significado es de desprecio total. Con esta expresión se trata de subestimar y humillar irracionalmente al gremio militar. No es pues precisamente –como es fácil de entender- que la palabra “cachaco” sea un halago o un reconocimiento a la sacrificada y difícil labor que presta un militar al servicio del país resguardando el orden y la seguridad en los lugares más abandonados de nuestro suelo patrio.
La ciudadana Flores no ha cesado en insultar a las personas desde siempre, es un “estilacho” que ella tiene –a decir por sus propias palabras- que aún no patentiza en INDECOPI; recordemos cuando en una interceptación telefónica propagada por la televisión, todo el país escuchó lo que dijo, “que se metan su alcaldía al poto”, palabras injuriosas que una vez más la llevaron a ella y a su partido a perder las elecciones municipales; craso y tremendo disparate propio de una mediocre.
Así mismo es relevante hacer memoria que su padre de igual forma insultó a Alejandro Toledo durante la campaña electoral en el 2001 por la presidencia, cuando se manifestó de manera discriminatoria ante una entrevista periodística remarcando con desprecio e ironía, “No voy a hablar del ´auquénido´ de Harvard”, mientras la candidata hija y Bedoya hijo, se bañaban en una piscinita de San Isidro; gran error de marketing, demostrar sus signos exteriores de riqueza cuando la gente de los sectores populares que son los que dan el triunfo a los políticos ni siquiera tienen agua para cocer sus alimentos.
En otras palabras le dijo a Toledo que no era un individuo humano sino un ejemplar camélido de los andes meridionales cuyas cuatro especies son la vicuña, la alpaca, la llama y el guanaco; se desconoce hasta la fecha a cuál de estas especies de nuestra serranía se refería el patriarca de la Flores Nano. Éste es pues el entorno donde se ha educado la “eterna e injuriosa perdedora”, quien aún no ha descartado su candidatura a la presidencia para el 2,016.
La ciudadana Flores ha sido clara con respecto de lo que piensa de los militares. Con sus ingratas y agravantes expresiones no se ha referido únicamente al Presidente Humala, se ha manifestado de manera abierta en contra de todos los militares, tratándolos de “cachacos”. Ya sabemos lo que le espera a los uniformados y a su familia de llegar esta ciudadana a la presidencia.
Parece que la vuelta cíclica se repite y las caretas se van cayendo poco a poco con respecto al “cariño” que algunos políticos tienen por los militares. El autor de “plata viene sola” García Pérez fue el primero en desnudarse, dijo cuando aún era Presidente en su segundo gobierno que “Los militares no deberían tener privilegios”, refiriéndose a su fracasada pretensión de eliminar la pensión renovable (cédula viva), comparándolos con los pensionistas de la Ley 19990 quienes tienen congelados sus ínfimos haberes.
Igual trato abusivo quiso darle a los militares quienes son los que defienden la democracia y más bien son los políticos mismos los que la destruyen a través de balconazos, decretos de urgencia cuestionados, otorgando indultos a los narcotraficantes, haciendo apología a los terroristas y admirándolos por su “mística” como lo hiciera García refiriéndose a los subversivos.
La ciudadana Flores debe rectificar su comportamiento agresivo en contra de los militares, de igual forma se podría generalizar y hablar de los abogados como ella, si nos refiriéramos que todos son unos, “cachueleros”, “gánsters” que asaltan a sus clientes o que son defensores a ultranza de narcotraficantes, asesinos y secuestradores convictos y confesos.
Es deber de todo militar alzar su voz de protesta frente a estos inmerecidos agravios vengan de donde vengan, toda vez que no hacen sino que enfrentar civiles contra militares; peruanos contra peruanos. Los líderes que tienen facilidad para dar entrevistas por la televisión no deben callar estas injurias. Al final no recordaremos tanto las palabras de nuestros enemigos, sino más bien el silencio de nuestros amigos.
Nota: Pido por favor que tengas la amabilidad de reenviar el presente escrito a la familia militar, esposa, hijos, padres y amigos a fin de tomar conocimiento sobre estas lamentables expresiones y tenerlas en cuenta para el 2,016