NARCOPOLICIAS

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"Narcopolicías" trasladaban droga en carros oficiales

Sabado, 04 de octubre de 2014 | 4:30 am

Tras sus PASOS. Policías detenidos fueron vigilados tres meses. Por ello se conoce cómo se realizaban las transacciones con narcotraficantes.

Liubomir Fernández.

Puno.

La banda de narcopolicías, capturada el último jueves en Puno, usaban vehículos oficiales para

transportar la droga hasta el lugar acordado con sus compradores. Estos por lo general eran narcotraficantes, quienes soltaban información para comprar estupefacientes más baratos. La droga era vendida a 25% menos del costo real, incluido el traslado.

La banda integrada por el comandante PNP, Carlos Herrera Sánchez y los cinco suboficiales Arturo Jesús Mena Bedon (técnico de primera), Héctor Martín Bandera Escobedo (técnico de tercera) Robert Huallpa Fernández (técnico de tercera), Centella Quispe Paz (suboficial de primera)  y Mauro Pavio Catacora (suboficial de segunda) hacían operativos clandestinos contra "burriers" para apropiarse de la mercancía y luego comercializarla.

El transporte se hacía al mando de Herrera Sánchez.

Se conoce que los puntos de transacción ilegal era Desaguadero y Kasani, ubicados en la frontera con Bolivia. En algunas ocasiones cruzaban el límite con la ayuda de colegas de los Puestos de Vigilancia de Frontera (PVF). Se presume que este apoyo no era gratuito. A cambio los agentes también buscaban beneficiarse de un porcentaje de la venta.

VIGILADOS

La forma como operaban lo "narcopolicías" quedó registrada en las conclusiones preliminares a las que arribó el grupo de contrainteligencia, cuyos miembros siguieron los pasos de los efectivos investigados durante 18 horas al día de tres meses.

Otro detalle relevante fue que los policías tenían bienes mayores a sus ingresos económicos. 

“Cuando les hicimos el seguimiento veíamos que tenían casas que ningún otro policía podría acceder fácilmente con su sueldo. Pero lo curioso era que varios de estos bienes entre casas, carros y otros, no estaban a su nombre si no al de sus familiares más cercanos”, precisó una fuente policial.

Según el peritaje preliminar al que fueron sometidos los más de 40 celulares incautados en la casa de los intervenidos, quedó corroborado que mantenían comunicación con narcotraficantes del Vraem y compradores bolivianos. Las conversaciones eran a través de claves específicas. Eso les permitía cambiar de teléfonos en cualquier momento y recobrar el diálogo con claves. “Eso explica porqué se encontró varios números celulares. Pero a todos se le hizo el seguimiento respectivo”, precisó.

Fuentes policiales explicaron que hay efectivos de los puestos de control implicados.  Ellos serán incluidos en la investigación, en la medida que avancen las declaraciones de los implicados.

El general Alberto Villalobos Fernández, sostuvo que la investigación fue pulcra por la calidad de información que se logró acopiar.     ❧

Claves

La banda del comandante Carlos Herrera Sánchez, no era la única que operaba en Puno. En febrero de 2013 otra organización criminal de policías fue desarticulada. Esta estaba integrada por Oscar Peralta Monroy (a) “La Chichi”, Neptalí Efraín Mendoza Castillo (a) “One Dólar” y Uriel Bartolomé Salazar B      ac (a) “Chisito”. Todos decomisaban droga de forma ilegal y la vendían también a narcotraficantes bolivianos.