Julio Abanto Llaque.-
En tiempos donde la violencia urbana es una constante, nos es difícil creer que hace más de un siglo, en este mismo suelo ya existía un pequeño grupo de vigilantes encargados de velar por la justicia y la seguridad de la
población. En éste caso la lucha diaria, no era con los asaltantes, pandilleros o secuestradores que hoy nos obligan a cerrar nuestras calles con gruesa rejas, levantar casetas de vigilancia e implantar un sistema de seguridad ciudadana1; este pequeño grupo de gendarmes, combatía a los bandoleros de caminos, abigeos y montoneros. Aquí su historia.
Algunos escritos antiguos nos detallan que durante el siglo XVII, el Conde de Lurigancho había armado un pequeño ejército al cual denominó “Los Pregoneros de Lurigancho”, la formada milicia destacaba de otras por lucir hermosos uniformes, sin embargo son otros personajes: “los serenos”, quienes velaban por el buen descanso y seguridad de los ciudadanos de una Lima que lucia amurallada.
Antes de la presencia de una policía definida, era el ejército a quien se confiaba de velar por la seguridad en las zonas rurales. Lurigancho por su proximidad al palenque de Huachipa y por la presencia de caminos que unían Lima con el interior del país era un lugar de ocasionales asaltos y robos. Por otro lado, grupos de montoneros asediaban duros golpes al ejército realista y ocasionaban maltratos en los huertos y chacras de las haciendas de Lurigancho. Pancho Fierro, extraordinario pintor costumbrista, de a mediados del siglo XIX, nos ha dejado una curiosa estampa donde se ve y se lee: “El Coronel de milicia de Lurigancho en el paseo”, en la acuarela se aprecia la manera como un oficial a caballo solía pasear acompañado de personal de su tropa, quienes para protegerlo del duro calor mantienen en sus manos una enorme sombrilla y un abanico multicolor.
La primea fuerza policial formada es gracias al libertador Simón Bolívar quien en 1825 creó la “Guardia Nacional”, tiempo después reaparecen los Serenos como cuerpo de vigilancia. Agustín Gamarra realiza en 1839 la primera reorganización del cuerpo de serenos y vigilantes, La Guardia Nacional entra nuevamente en la historia en 1845 gracias al Mariscal Ramón Castilla2.
La gendarmería en Lima se crea en 1852 por orden de Gral. José Rufino Echenique, como una fuerza policial armada tanto de infantería que como de caballería a cargo de oficiales del ejército.
Para darnos una idea de lo peligroso que eran algunos de los caminos que conducían a Lima podemos mencionar que para el 02 de julio de 1863, la intendencia de la policía de Lima, hace públicas sus instrucciones a las fuerzas rurales de la capital: “después de la primera ronda se situaran las partidas en los cruceros de los caminos en donde regularmente acuden los pasajeros y existiendo el riesgo de ser asaltados, debiendo verificarlo: la del valle de Ate, en la Cruz de Hierbateros; la de Miraflores, en Balconcillo; la de la Magdalena, en Los Tres Puentes; la De La Legua, en el Tambo; la de Carabayllo, en Repartición; la de Lurigancho, en Flores; y la de Lurín en el puente de San Pedro”.
Este puesto policial que contaba con su caballeriza, duraría hasta los inicios de la “década del 40”, siendo una de las pocas estructuras que quedarían en pie después del terremoto de esa década. A los gendarmes, la gente de campo les solía denominar “los guayruros”, en burla por el color rojo del uniforme y el negro de las polainas.
El año de 1922, el presidente Augusto B. Leguía reemplaza la Gendarmería del Perú por la “Guardia Republicana”. Asimismo crea el “Cuerpo de Investigación y Vigilancia”, la cual tiempo después se constituiría en la reconocida “Policía de Investigaciones del Perú” (PIP)
A mediados del siglo XX, se dispone de un nuevo local, que se sitúa en la propiedad del fundo Zárate, propiedad de la familia Solari, puesto que perdurará hasta fines de la década de 1960. Nuevamente tenemos en el archivo del pueblito de Lurigancho, otra fotografía donde se aprecia a dos policías de la nueva Guardia Civil posando con algunos vecinos.Los guardias Pinto y Chávez, como los recuerdan los pobladores mayores, solían hacer su ronda muy temprano para llevar nuevamente a la escuela a los niños que preferían el paseo a las clases diarias, sin lugar a duda hay cosas que no cambian. Observe usted los vistosos uniformes con clásicos pantalones anchos de campaña.
Si bien la vida rural en Lurigancho era tranquila, según nos comenta el Sr. Manuel Antonio Sanchez Rosell (74 años): “Solíamos caminar muchas veces desde Acho, a si sea de noche y no te pasaba nada, te ibas a jugar fulbito a la hacienda Pedreros o Nieveria (Huachipa) y pasabas por Campoy, donde todo era puquial y cañaveral y no te pasaba nada”. Todo parece cambiar cuando empiezan surgir las barriadas a la periferia de Lima y algunos mal habituados vecinos de Cantagallo decidían cruzar el río y “pasear” por estas tierras.
De estos tiempos, existieron personajes culpables de robos a los ranchos y huertos de lugareños, uno inmortalizado por el mismo Enrique Solari en uno de sus cuentos, es el “Tigre”, apodado así por los malabáricos saltos que daba al incursionar y escapar de sus captores. Otros no menos famosos son el “Negro Cañón”, recordado por ser muy negro y tener la cara de “gorila” que daba mucho espanto, según lo recuerda la Sra. Gladis Lino Colán y finalmente, no menos celebre “Matasiete”, razones sobran para entender su apodo.
En la actualidad en el distrito se ubican nueve comisarías, siendo la más antigua la de Zárate cuyo actual local fue inaugurado el 14 de febrero de 1976, era en aquel entonces Alcalde del distrito el Dr. Crisólogo Linares Gonzáles. La policía además presta atención en el cuidado de los dos centros penitenciarios e implementan una subregión de emergencia 105.
Nuestra actual fuerza policial, Policía Nacional del Perú, es la fusión de tres ramas policiales: la Guardia Republicana, la Guardia Civil y la Policía de Investigaciones del Perú, fueron unificadas en 1988 y cumplen una importante labor social y de seguridad. Con el incremento de la inseguridad y la delincuencia, recientemente se viene aplicando en nuestro distrito un interesante sistema de seguridad ciudadana3, el 4 de diciembre la actual ministra del interior Pilar Mazzetti juramentó en nuestro distrito a 800 taxistas involucrados en una red de información a la policía frente a eventuales incidentes. Si desea saber mas sobre la historia de nuestra Policía Nacional visite su museo que se sitúa en jirón Huanta Nº 116, Plaza Italia, Barrios Altos.000000000000000000000000000000000000000
población. En éste caso la lucha diaria, no era con los asaltantes, pandilleros o secuestradores que hoy nos obligan a cerrar nuestras calles con gruesa rejas, levantar casetas de vigilancia e implantar un sistema de seguridad ciudadana1; este pequeño grupo de gendarmes, combatía a los bandoleros de caminos, abigeos y montoneros. Aquí su historia.
Algunos escritos antiguos nos detallan que durante el siglo XVII, el Conde de Lurigancho había armado un pequeño ejército al cual denominó “Los Pregoneros de Lurigancho”, la formada milicia destacaba de otras por lucir hermosos uniformes, sin embargo son otros personajes: “los serenos”, quienes velaban por el buen descanso y seguridad de los ciudadanos de una Lima que lucia amurallada.
Antes de la presencia de una policía definida, era el ejército a quien se confiaba de velar por la seguridad en las zonas rurales. Lurigancho por su proximidad al palenque de Huachipa y por la presencia de caminos que unían Lima con el interior del país era un lugar de ocasionales asaltos y robos. Por otro lado, grupos de montoneros asediaban duros golpes al ejército realista y ocasionaban maltratos en los huertos y chacras de las haciendas de Lurigancho. Pancho Fierro, extraordinario pintor costumbrista, de a mediados del siglo XIX, nos ha dejado una curiosa estampa donde se ve y se lee: “El Coronel de milicia de Lurigancho en el paseo”, en la acuarela se aprecia la manera como un oficial a caballo solía pasear acompañado de personal de su tropa, quienes para protegerlo del duro calor mantienen en sus manos una enorme sombrilla y un abanico multicolor.
La primea fuerza policial formada es gracias al libertador Simón Bolívar quien en 1825 creó la “Guardia Nacional”, tiempo después reaparecen los Serenos como cuerpo de vigilancia. Agustín Gamarra realiza en 1839 la primera reorganización del cuerpo de serenos y vigilantes, La Guardia Nacional entra nuevamente en la historia en 1845 gracias al Mariscal Ramón Castilla2.
La gendarmería en Lima se crea en 1852 por orden de Gral. José Rufino Echenique, como una fuerza policial armada tanto de infantería que como de caballería a cargo de oficiales del ejército.
Para darnos una idea de lo peligroso que eran algunos de los caminos que conducían a Lima podemos mencionar que para el 02 de julio de 1863, la intendencia de la policía de Lima, hace públicas sus instrucciones a las fuerzas rurales de la capital: “después de la primera ronda se situaran las partidas en los cruceros de los caminos en donde regularmente acuden los pasajeros y existiendo el riesgo de ser asaltados, debiendo verificarlo: la del valle de Ate, en la Cruz de Hierbateros; la de Miraflores, en Balconcillo; la de la Magdalena, en Los Tres Puentes; la De La Legua, en el Tambo; la de Carabayllo, en Repartición; la de Lurigancho, en Flores; y la de Lurín en el puente de San Pedro”.
Este puesto policial que contaba con su caballeriza, duraría hasta los inicios de la “década del 40”, siendo una de las pocas estructuras que quedarían en pie después del terremoto de esa década. A los gendarmes, la gente de campo les solía denominar “los guayruros”, en burla por el color rojo del uniforme y el negro de las polainas.
El año de 1922, el presidente Augusto B. Leguía reemplaza la Gendarmería del Perú por la “Guardia Republicana”. Asimismo crea el “Cuerpo de Investigación y Vigilancia”, la cual tiempo después se constituiría en la reconocida “Policía de Investigaciones del Perú” (PIP)
A mediados del siglo XX, se dispone de un nuevo local, que se sitúa en la propiedad del fundo Zárate, propiedad de la familia Solari, puesto que perdurará hasta fines de la década de 1960. Nuevamente tenemos en el archivo del pueblito de Lurigancho, otra fotografía donde se aprecia a dos policías de la nueva Guardia Civil posando con algunos vecinos.Los guardias Pinto y Chávez, como los recuerdan los pobladores mayores, solían hacer su ronda muy temprano para llevar nuevamente a la escuela a los niños que preferían el paseo a las clases diarias, sin lugar a duda hay cosas que no cambian. Observe usted los vistosos uniformes con clásicos pantalones anchos de campaña.
Si bien la vida rural en Lurigancho era tranquila, según nos comenta el Sr. Manuel Antonio Sanchez Rosell (74 años): “Solíamos caminar muchas veces desde Acho, a si sea de noche y no te pasaba nada, te ibas a jugar fulbito a la hacienda Pedreros o Nieveria (Huachipa) y pasabas por Campoy, donde todo era puquial y cañaveral y no te pasaba nada”. Todo parece cambiar cuando empiezan surgir las barriadas a la periferia de Lima y algunos mal habituados vecinos de Cantagallo decidían cruzar el río y “pasear” por estas tierras.
De estos tiempos, existieron personajes culpables de robos a los ranchos y huertos de lugareños, uno inmortalizado por el mismo Enrique Solari en uno de sus cuentos, es el “Tigre”, apodado así por los malabáricos saltos que daba al incursionar y escapar de sus captores. Otros no menos famosos son el “Negro Cañón”, recordado por ser muy negro y tener la cara de “gorila” que daba mucho espanto, según lo recuerda la Sra. Gladis Lino Colán y finalmente, no menos celebre “Matasiete”, razones sobran para entender su apodo.
En la actualidad en el distrito se ubican nueve comisarías, siendo la más antigua la de Zárate cuyo actual local fue inaugurado el 14 de febrero de 1976, era en aquel entonces Alcalde del distrito el Dr. Crisólogo Linares Gonzáles. La policía además presta atención en el cuidado de los dos centros penitenciarios e implementan una subregión de emergencia 105.
Nuestra actual fuerza policial, Policía Nacional del Perú, es la fusión de tres ramas policiales: la Guardia Republicana, la Guardia Civil y la Policía de Investigaciones del Perú, fueron unificadas en 1988 y cumplen una importante labor social y de seguridad. Con el incremento de la inseguridad y la delincuencia, recientemente se viene aplicando en nuestro distrito un interesante sistema de seguridad ciudadana3, el 4 de diciembre la actual ministra del interior Pilar Mazzetti juramentó en nuestro distrito a 800 taxistas involucrados en una red de información a la policía frente a eventuales incidentes. Si desea saber mas sobre la historia de nuestra Policía Nacional visite su museo que se sitúa en jirón Huanta Nº 116, Plaza Italia, Barrios Altos.000000000000000000000000000000000000000
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